La primera es que judíos y árabes están enfrentados por un mismo territorio, pero por qué. De una forma muy resumida la explicación es la siguiente: para los judíos es su tierra prometida, y para los árabes es su territorio legítimo tras ser conquistado en el siglo 638 d.C., momento en el que pasó a llamarse Palestina, y a sus habitantes como palestinos. Y la religión como centro del enfrentamiento: la Tora y el Corán.
La segunda clave es que es una zona estratégica, tanto comercial como militarmente, es
la entrada a Oriente, así como la localización de pozos de petróleo. También las grandes potencias han hecho lo que les ha interesado con este conflicto. “Tú, pares y yo, nones” ha sido una de las políticas utilizadas, aunque no sé si es mejor que la de “de puente a puente, y tiro porque me lleva la corriente”. Habría que preguntárselo a ellos, a las grandes y temidas potencias mundiales. A los que tienen el poder en sus manos, y al parecer poco hacen por utilizarlo justamente, sin intereses ni negocios de por medio.Demasiada historia, demasiada creencia, demasiado conflicto y demasiada tierra. Imposible de contar en unas pocas líneas.
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