Dando ejemplo

sábado, 20 de febrero de 2010
Los gestos poco elegantes no sólo forman parte del lenguaje no verbal de las clases menos más bajas, o más vulgares. Lo hemos podido comprobar en muchos casos, por ejemplo: famosos que se enfadan porque les persiguen los paparazzi y ellos responden con unos gestos poco amables. Pero lo último en este tipo de gestos, la última moda en estos gestos lo ha protagonizado nuestro ex presidente del gobierno: José María Aznar.

Y es que el anterior líder (o no tan anterior) del Partido Popular respondió con uno de estos gestos a unos estudiantes de la universidad de Oviedo que protestaban por su administración respecto a la guerra de Irak. Todos estamos seguros que los jóvenes no estarían diciendo palabras agradables al ex presidente, por lo que éste, al sentirse atacado, manifestó su desacuerdo con lo que comúnmente se conoce como sacar el dedo a pasear.
Está claro que no es un gesto que un político debiera de hacer, pero todos somos humanos. Las críticas le han llovido por todos los medios y lados; excepto por parte de su partido. Él sólo se ha tirado piedras a su tejado, y ha conseguido que le dediquen críticas duras que antes no se habían hecho, y que merecía: desde que no sabe perder hasta que es un prepotente y un arrogante.

Los políticos se han echado las manos a la cabeza y han dicho que cómo el ex presidente ha cometido esa acción tan absurda. Se han asombrado de la falta de respeto y de la reacción poco meditada. Piensan que un político ha de dar ejemplo y transmitir respeto a la población.


Y yo les digo: no se preocupen. Relájense. La población no es tonta y sabe de quién y de qué tiene que tomar ejemplo. Como los ciudadanos no somos imbéciles, o por lo menos algunos, les decimos: tranquilos, ustedes son las últimas personas de las que queremos y debemos tomar ejemplo. Así que ya pueden dormir tranquilos.

Nieve: y vuelve a nevar...

lunes, 15 de febrero de 2010
Otra vez un temporal de frío se cuela en nuestro país. El frío ha llegado con fuerza a nuestras casas, a nuestros trabajos, a nuestros estudios, a nuestros cuerpos… y nos pasamos el día congelados. Hay mucha gente, entre la que me incluyo, que está harta y quiere que llegue ya el calorcito.

Antes que nevase era un acontecimiento, y yo era de las que se volvía loca cuando esto pasaba y salía a la calle corriendo para disfrutarlo. Pero durante este duro invierno, la nieve se está convirtiendo en una costumbre y eso ya no me gusta tanto. Antes era especial y bonito; ahora es una pesadez y ya no tiene el mismo encanto. Me sigue haciendo ilusión pero no es lo mismo.
Cuando nieva hace más
frío, aunque supuestamente ocurre lo contrario, es decir, hace menos frío; pero eso mis huesos no lo notan; sino que notan todo lo contrario. Además, desde un punto de vista objetivo la nieve trae muchos problemas para una ciudad que no está acostumbrada a ella, incluso para áquellas que sí lo están.

La nieve crea problemas en las carreteras: los coches tienen que tener mucha precaución, hay peligro por si hiela; tienes que llevar cadenas… También produce problemas en los ciudadanos que vamos a pie o en transporte público. El metro y los autobuses están a rebosar de gente, no hay quien lo aguante. Cuando vamos por la calle tenemos que ir con pies de plomo porque a la mínima te pegas un resbalón y acabas en el suelo; y las personas mayores no pueden salir de casa, así evitan correr riesgos.

Este fenómeno deja a pueblos aislados, incluso a grandes ciudades que no están preparadas para esa situación. Un jaleo.

La nieve es bonita, que nieve en Navidad también; pero crea muchos problemas y cuando lo hace tan de continuo, ya ni cierran los colegios ni las universidades, y por esto que nieve tanto ya no es lo que era.

Mis cinco minutos de Gloria

Hoy ha sido mi primera vez; mi primera vez en la radio… ¡qué malpensados!

Gracias a mis compañeras y amigas he podido hacer mi primera incursión en el mundo de la radio, ya emitiendo en directo (las prácticas en clase en este caso no cuentan). Y me ha encantado. Estoy muy contenta. Antes dudaba de qué medio me gustaba más, pero con esta práctica definitivamente sé que es la radio.

Me dijeron que si quería ir hoy para hablar sobre los Carnavales, bueno sobre el Carnaval de Cádiz. Y yo encantadísima de la vida. Mi primera participación y encima hablando sobre algo de lo que más me gusta. Claramente, me lo dijeron porque me consideran una freak; pero yo tan orgullosa que estoy.

Ha sido una hora genial, en la que he hablado, he improvisado y hasta he cantado (cosas del directo señores, soy una gran profesional), y en qué momento: una persona misteriosa ha llamado para que cantase más; habrá sido alguien de mi familia que tienen mucha guasa. Incluso me han escuchado hasta en Jerez, que todavía me hace más ilusión.

Tengo la sensación de que por fin he hecho algo de provecho. Estoy hasta contenta de estar estudiando lo que estudio, y eso es raro, muy raro. Por fin he hecho algo relacionado con mi carrera. Y qué mejor inicio que con los Carnavales de Cádiz y la comparsa de Jesús Bienvenido (siempre dándome buenos e inolvidables momentos).
Muchas gracias chicas. A lo mejor esta es la primera de muchas veces con ellas. Ha sido genial. Estoy muy feliz.